Friday, May 10, 2019
Review: The Silence
Cavando en un sistema de cuevas inexploradas en las profundidades de las Appalachian Mountains en Pennsylvania, científicos desatan criaturas voladoras prehistóricas que inmediatamente destruyen todo lo que encuentran en su camino. Llamados Vesps, estos depredadores atacan cualquier cosa que haga ruido. Mientras tanto, la familia Andrews de Montclair, New Jersey, vive una existencia suburbana más o menos normal. El padre, Hugh (Stanley Tucci), dirige un negocio de construcción con su mejor amigo Glenn (John Corbett), la madre, Kelly (Miranda Otto), cuida a su madre mientras cría a su hijo, Jude (Kyle Breitkopf) y su hija adolescente con problemas de audición, Ally (Kiernan Shipka). Cuando comienzan a llegar noticias sobre estos Vesps y cómo están eliminando a la población humana del noreste de los Estados Unidos, la familia Andrews decide ir lo más lejos posible y a regiones menos pobladas. Pronto se enteran de que su capacidad para comunicarse con ASL (lenguaje de señas) es una ventaja, ya que es imposible sobrevivir haciendo más ruido que un susurro. Los Andrew finalmente encuentran su camino hacia una granja aislada, pero cuando Kelly sobrevive el ataque de un Vesp, Hugh y Ally deben ir al pueblo más cercano para encontrar antibióticos. En este viaje, se encuentran con un predicador misterioso, que les pide que se unan a su culto, y mientras tratan de evitarlo, pronto descubren que sus planes son mucho más oscuros. La familia Andrews debe encontrar una forma de detenerlo y de alguna manera ir al norte, a un lugar seguro, porque las noticias informan que los Vesps no pueden sobrevivir en el frío.
Cualquiera que haya visto películas a lo largo de los años reconocerá esa extraña tendencia en la que dos películas llegan a la escena casi al mismo tiempo y ambas cubren temas casi idénticos (Armageddon/Deep Impact, Mars Attacks/Independence Day, Dante's Peak/Volcano, entre otras). En 2018, los fanáticos del género terror tuvieron la oportunidad de ver una película asombrosamente pequeña e impresionante en la que monstruos se apoderan del mundo y cazan humanos por medio de sonidos. Esto es, por supuesto, A Quiet Place. Ahora, más o menos, un año después, aparece The Silence. Y, adivinen qué? Se trata de unos monstruos que cazan y atacan el mundo a traves de sonidos. Ahora, si esa fuera la única similitud, probablemente podría ser un poco más condescendiente con The Silence y, por lo que he visto, muchas de las similitudes son pura coincidencia. Desafortunadamente, no oculta el hecho de que si ya han visto A Quiet Place, entonces ya han visto todo lo que The Silence tiene para ofrecer, solo que mucho mejor.
La película es sobre una familia, cómo en A Quiet Place. Sólo que la familia en A Quiet Place es mucho más interesante y agradable. La familia en ambas películas sabe lenguaje de señas debido a que la hija (también en ambas películas) es sorda, por lo que les da una ventaja táctica para vivir en silencio. Podría seguir con las similitudes, pero hay demasiadas para mencionar. Además, los monstruos en The Silence no son tan desagradables o amenazantes como en A Quiet Place. Diré que la única gran diferencia entre las dos películas fueron los puntos de partida. The Silence comienza antes de que los monstruos ataquen, mientras que A Quiet Place comienza mucho después de que la humanidad casi haya sido cazada hasta el punto de extinción.
Algunos puntos positivos son: las actuaciones fueron bastante buenas, especialmente la de Stanley Tucci y Kiernan Shipka. Hubieron algunas escenas realmente buenas y espeluznantes, los diseños de las criaturas fueron muy satisfactorios y el sacerdote fue realmente espeluznante (aunque, cuando el tema de la religión llegó, arruinó la película). Lo que creo que es digno de mencionar es el uso del lenguaje de señas por parte de toda la familia e incluso de algunos amigos. No lo encontré desagradable y lo encontré cómo un atractivo de la película. Especialmente porque las personas sordas se enfrentan a muchos estigmas sociales y algunos incluso son separados de sus familias. Tristemente en el lado negativo, es demasiado corta. Con una hora y treinta minutos de duración, corre a través de escenas y momentos muy importantes y relevantes, haciendo que la película parezca anticlimática e incompleta. El final también fue muy decepcionante. Fue satisfactorio, pero fue repentino y bastante incompleto.
En general, casi siempre hay algo extraño con las películas originales de Netflix. Normalmente comienzan muy bien, tienen una trama interesante y, cuando se trata del gran final, caen en picada. The Silence no es la excepción. Una vez más, Netflix nos lleva a un ambiente post apocalíptico con muchos momentos de tensión, emociones y actuaciones bastante buenas, a pesar de tener una chica sorda que puede hablar sin ningún problema o algún impedimento. Al final, The Silence no es una mala película, pero tampoco es genial. Es una película de drama/suspenso decente que se eleva por encima de la mediocre Bird Box, aunque no está al nivel de A Quiet Place. Si bien toma prestado muchos elementos de A Quiet Place, entrega decentemente un buen tema. También creo que las actuaciones principales de Stanley Tucci y Kiernan Shipka son lo suficientemente buenas como para mantener a uno interesado en la trama. Si disfrutan de temas relacionados con criaturas extrañas o lo post apocalíptico, puede ser que sea de su interés.
Puntuación: 2 alcapurrias y media mordida.
Subscribe to:
Post Comments (Atom)
No comments:
Post a Comment