En una desesperada necesidad de dinero, Samantha Craft (Hayley Griffith) toma un trabajo como repartidora de pizzas en Home Run Pizza, con la esperanza de hacer que algo suceda con la oportunidad que le brindó el lujurioso Duncan (AJ Bowen). Asignada a las peores áreas de la ciudad, Sam no tiene suerte haciendo dinero rápido, pero pronto se le presenta una oportunidad de entrega a Mill Basin, una parte lujosa de la ciudad. Al llegar a una mansión con la esperanza de cobrar una gran propina, Sam se molesta al ver que no le dan ni un solo centavo y regresa a su scooter que no arranca. Harta de la situación, Sam entra a la casa buscando una recompensa, solo para descubrir un culto que se prepara para darle la bienvenida al dios demoníaco Baphomet, con la líder Danica Ross (Rebecca Romijn) que necesita una virgen para completar la tarea. Reconociendo tal pureza en Sam, Danica y el culto se disponen a reclamar a la repartidora de pizzas para el último sacrificio, comenzando una persecución que se extiende por todo el vecindario.
No estaba realmente seguro de en qué me estaba metiendo cuando me senté a ver esto. Si están buscando una comedia de terror para ver, déjeme informarles que no hay comedia ni horror en esta película. Lo que se obtiene es una buena historia unida con buenas actuaciones y una dirección promedio. Con un título como Satanic Panic, tuve que echarle un vistazo. Quién sabe, podría haber sido brillante. Incluso el hecho de que Fangoria estuviera involucrado en el proyecto fue un gran atractivo. Sin embargo, no me llevó mucho tiempo para comenzar a lamentarme de desesperación. Lo peor de esta película es el humor inmaduro que tiene. Evidentemente, decir groserías sobre órganos sexuales o ser un macho alfa es aparentemente gracioso. Bueno, si hubieran sido manejados correctamente, podrían haberlo sido. Pero todo lo que hace es que los personajes se vean como idiotas. La mejor escena de comedia en la película es cuando el personaje principal escapa del culto y se encuentra con la retorcida hija de Danica, Judi. Hay un pequeño juego de palabras, una pequeña situación de comedia y muchas payasadas, y aunque todo esto tiene matices oscuros, fue divertido de ver y me hizo reír (la primera y única vez).
Los escritores deberían haber eliminado el elemento de comedia y centrarse en el lado oculto y de terror de las cosas. Ese elemento ya es bastante fuerte con hechizos, demonios y vírgenes. Esto podría haber sido una verdadera película de terror, pero intentaron ser demasiado cómicos. Otra cosa que necesitaba mucha atención es la dirección. Chelsea Stardust no hace honor a su nombre. En general, su dirección es promedio. La secuencia de apertura tiene la sensación de una película perdida, que siempre es algo malo porque la mayoría de estas películas son, honestamente, basura. Esto hace que ella se ponche antes de que empezara la historia. Afortunadamente, cambió al estilo de tercera persona, aunque tiene mucho trabajo de cámara tembloroso, especialmente en las escenas donde hay mucha gente.
Pero su mayor deficiencia es la falta de atmósfera. Si buscaban una película más cómica, entonces el ambiente de horror podría no haber sido lo que querían. Sin embargo, hay muchas escenas en las que una atmósfera más oscura habría aumentado el poder de la película. Hay escenas importantes que debían ser más oscuras y melancólicas. Eso incluso podría haber ayudado con el lado cómico de la historia, ya que la comedia siempre funciona mejor cuando camina de la mano con la tragedia. Lo único en lo que sobresale Stardust es en el ritmo. La película se mueve y corre a toda velocidad en todo momento y ayuda a mantener todo firme.
Ahora, el elenco es bastante bueno en sus roles y sus representaciones. No obstante, debo decir que fue difícil distinguir a Rebecca Romijn bajo el maquillaje de bizcocho que tenía. Ella interpreta a la líder perfecta y dominante, Danica Ross, que no aguanta nada de nadie y sabe cómo controlar a sus discípulos. Jerry O'Connell aparece como su esposo Samuel, un mujeriego con mala muerte. Es una pena que tenga una parte tan pequeña (literalmente). Ruby Modine es buena como su astuta e intrigante hija Judi. Incluso cuando se ve obligada a formar una alianza con Samantha, no se está seguro de qué lado está. Luego tenemos a nuestra heroína, Samantha Craft, interpretada por Hayley Griffith. Griffith hace un buen trabajo con la ingenuidad de su personaje, pero es esa ingenuidad lo que me causa un problema. Cómo puede alguien ser tan inocente y crédulo hoy día? Y el hecho de que se supone que es virgen es absurdo. Son las cosas tan diferentes en Estados Unidos o están tratando de aferrarse a los ideales del pasado? De cualquier manera, daña al personaje y a la historia, ya que es un elemento importante para la trama.
En general, aquí tenemos una película que intenta demasiado y pierde su objetivo. Las actuaciones son agradables y la historia lo sería si se hubiera tratado mejor. Es una verdadera lástima, ya que podría haber sido una película de terror épica. Al final, Satanic Panic es una película de comedia/terror que podría haber tenido el potencial de proporcionar un deleite impactante y risas macabras, pero termina siendo poco atractiva, plana, con intentos excesivamente amplios de humor y poco horror. Es difícil de ver y nunca se conforma con un tono consistente, lidiando con encuentros horripilantes y demonios, pero también busca ser graciosa con un material mediocre. La mezcla de géneros ha funcionado para muchas otras películas, tristemente... aquí no es satisfactorio.
Puntuación: 1 alcapurria.
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