Wednesday, February 23, 2022

Review: The 355


En Colombia, el agente de la DNI Luis Rojas (Edgar Ramírez) ha descubierto la posible venta de un disco especial que contiene un código para un sistema capaz de incapacitar cualquier defensa de ciberseguridad, exponiendo al mundo a un desastre. Buscando vender el artículo, Luis es abordado por la psicóloga del DNI Graciela Rivera (Penélope Cruz), quien trata de entender qué está pasando. Enviado para detener cualquier transferencia del disco, la agente de la CIA Mace Browne (Jessica Chastain) viaja a París con su compañero, el agente Nick Fowler (Sebastian Stan), y se entera de que la agente del BND Marie Schmidt (Diane Kruger) también tiene la tarea de recoger el premio. Cuando estos esfuerzos fallan y se revelan las traiciones, las mujeres, junto con la agente del MI6 Khadijah Adiyeme (Lupita Nyong'o), eligen formar un equipo para adquirir la unidad por sí mismas, y finalmente se encuentran con Lin Mi Sheng (Fan BingBing), una agente del MSS que está un paso por delante del grupo mientras se disponen a evitar el día del juicio final.

Uno podría describir The 355 como un thriller de acción con un elenco de estrellas, y eso sería cierto. Pero una forma más simple de describir The 355 es que se trata de un thriller de espías invertido para que los viejos trucos se sientan nuevos. Nombra cualquier giro o truco que hayas visto, o un cambio de bando o alianza y The 355 lo tiene. Esto no quiere decir que la película no sea entretenida, es que justo cuando piensas que la película va a tener algunos riesgos reales, recurre a lo que la audiencia sabe. Es un placer para verla, sin duda, es el tipo de cine reconfortante que uno podría ver en casa con popcorn, bocadillos y bebidas, o para disfrutarla en el cine. Entonces, si están dispuestos a perdonarla por sus fallas, podrán pasar un buen rato viendo esto.

Cuando un negocio de armas sale mal y un dispositivo mortal termina a la vista de los hombres más malos y poderosos del mundo, la agente de la CIA Mace Browne y su socio Nick Fowler ponen en marcha una operación para ponerse en contacto con el hombre que lo tiene, el oficial colombiano Luis Rojas. Todo va según lo planeado hasta que fuerzas externas bloquean el acuerdo, creando una situación en la que Mace debe trabajar con un grupo de compañeras espías de agencias rivales para asegurarse de que el dispositivo no termine en las manos equivocadas.

El guión es tan sencillo como parece y nunca sientes que se estanca a medida que la historia salta de una ubicación global a otra para que las amenazas realmente se sientan grandes. La mayoría de las veces, en las historias de Misión: Impossible o de James Bond, las misiones se apegan a los lugares o ciudades a menos que alguien necesite un regaño (literal o figurativamente). Esto a menudo hace que las aventuras se sientan menos peligrosas, pero como el guión (un dispositivo tecnológico que puede hackear cualquier cosa) no requiere una ubicación específica para su uso, existe la oportunidad de saltar alrededor del mundo.

Esto no solo crea oportunidades para usar lugares locales, como los Tilbury Docks de Londres, para las secuencias de acción, sino que también ofrece una forma bastante natural de presentar a cada una de las agentes donde aún no existían relaciones orgánicas entre ellas. Si no fuera por la abundante exposición que aclara sus relaciones (contar versus mostrar) y la explicación excesiva de por qué algo es como es (posiblemente tratando de evitar que los espectadores asuman agujeros en la trama), el guión es bastante estricto y al menos intenta algunas sorpresas que cambian las expectativas a pesar del cliché demasiado frecuente de "sin cuerpo, sin muerte" en juego en todo momento.

El gran problema con la película es que, a pesar de las grandes cosas que suceden, se debate entre ser una narrativa bastante atractiva, inteligentemente diseñada y ponderada y el tipo de entretenimiento de lanzamiento directo al hogar. Es esta inestabilidad lo que hace que la película sea tanto divertida como frustrante. El elenco central es de primera categoría, encabezado por Jessica Chastain, a quien se unen Diane Kruger, Lupita Nyong'o, Penélope Cruz y Fan Bingbing. Cada una tiene tiempo para brillar, mostrando habilidades que demuestran por qué son consideradas las mejores agentes en sus respectivas agencias, sin perder la humanidad que buscan preservar en todo el mundo. El problema es que, si bien el elenco es creíble, la forma en que se filman las secuencias está tan llena de cámaras temblorosas y cortes rápidos que cada uno es más desorientador que sorprendente.

Es fácil creer que los personajes interpretados por Chastain, Kruger, Nyong’o, Cruz y Bingbing pueden hacer todo lo que observamos, pero sería bueno verlo de forma clara. Uno no puede decir si la falta de tomas más largas o una cámara más fija se debe a que algo se está ocultando o si tiene la intención de realzar la acción de alguna manera. En cambio, todo lo que puedo decir es que nadie debería enojar a estas mujeres (lo cual está bien en sí mismo), pero si una película de acción no parece llevar bien a cabo la acción, cuál es el punto?

En general, a pesar de algunas frustraciones, realmente vería una secuela. Los personajes ya están establecidos, lo que permite que la narrativa renuncie a las partes introductorias superficiales y simplemente deje que estas mujeres interactúen entre sí mientras se enfrentan a traficantes de armas internacionales o cualquier otra amenaza global. Hay una gran química entre el elenco y las diferencias/similitudes entre los personajes son suficientes para sentir que hay cohesión debido a sus especialidades. Si tuvieran un guión que pudiera aprovechar mejor sus habilidades sin sumergirse en los estereotipos culturales, también sería bueno. Al final, The 355 es colorida y tiene un ritmo enérgico, pero no es particularmente sofisticada. El valor de entretenimiento de la película surge con la oportunidad de ver a actrices normalmente reservadas estallar en un gran espectáculo de acción, eliminando a los villanos e interactuando con cierta sinceridad. Con expectativas reducidas, la película es un escapismo agradable, que ofrece violencia adecuadamente coreografiada y visuales ingeniosos. No se esfuerza por desafiar el género con ideas frescas, pero hay suficiente compromiso dramático y llamativo para mantener el interés.

Puntuación: 3 alcapurrias.

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