Jack (Rainn Wilson) es un multimillonario que financió la construcción de Mana One, una instalación de investigación submarina dirigida por el Dr. Zhang (Winston Chao) y su hija, Suyin (Li Bingbing). Tratando de alcanzar nuevas profundidades oceánicas con poderosos sumergibles, el equipo logra su objetivo, solo para encontrar problemas en la forma de un Megalodon, creando un potencial desastre si el tiburón no es destruido. Llamado al deber está Jonas (Jason Statham), un líder de búsqueda y rescate que se ha alejado de su alcoholismo para ayudar con la causa. Uniéndose a al grupo de Mana One mientras intentan rastrear al Megalodon, Jonas ahora enfrenta una caza imposible, tratando de mantener vivo al equipo mientras se adentran en mar abierto para matar al gigantesco tiburón antes de que llegue a los vacacionistas que visitan las playas para celebrar el verano.
The Meg desafortunadamente es un éxito de taquilla de verano mediocre en el mejor de los casos. La falta de desarrollo de la película, junto con actuaciones menos que estelares por parte de la mayoría del elenco, en última instancia, obstaculizaron mi capacidad de sentir remordimiento o simpatía por ciertos personajes, ni desarrollé ninguna conexión emocional con los personajes. No todo es sombrío, afortunadamente, el protagonista de la película, Jason Statham, ofreció una actuación pasable. Statham llevó la película desde la escena de apertura, hasta los créditos finales. Statham fue rudo y carismático. El y la adorable Shuya Sophia Cai como Meiying se robaron cada escena en la que estaban presentes. Aquí es donde terminan los elogios por las actuaciones. La incorporación de Li Bingbing fue un intento obvio de atraer a una audiencia extranjera, y el resto del elenco dio actuaciones olvidables.
Algo que se ve muy obvio en la película es que ciertos personajes se escribieron con el único propósito de que una escena de acción transcurriera tomando decisiones por conveniencia de la trama. Desde un punto de vista técnico, la película fue un deleite para los ojos. El CGI y los efectos especiales fueron muy buenos, excepto por un plano cerca del final de la película que involucra al Megalodon y Statham. El diseño de sonido fue genial, ya que realmente dio vida al extinto Megalodon titánico. Un detalle final (si se podría decir positivo) de la película fue su ritmo constante, eso si, hubo ciertas escenas que lastimaron por completo el desarrollo de los personajes y una intensa acción de parte del tiburón. En general, la película no es más que una trama poco profunda unida con escenas de acción de tiburones y personajes innecesarios y mal escritos. Al final, The Meg no tiene una acción o un horror real. Todo es predecible y no tiene nada nuevo o que se haya visto en otras películas similares. No recomendaría esta película, especialmente después de considerar el hecho de que hay películas más agradables y interesantes como otras opciones para un viaje al cine.
Puntuación: 1 alcapurria y media mordida.
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