En la noche de Halloween de 1976, 8 trabajadores de carnaval están viajando en su guagua a través del desierto de camino a su próximo evento. Durante la noche se encuentran la carretera bloqueada por espantapájaros, mientras investigan son atacados, algunos son asesinados y el resto son secuestrados. Se despiertan encadenados en una habitación de lujo, donde 3 personas vestidas aristocráticamente les dicen que han sido elegidos para participar en su juego anual de 31. Ellos deben tratar de sobrevivir 12 horas en un laberinto subterráneo conocido como Murderworld. Los 5 sobrevivientes, Roscoe Pepper (Jeff Phillips), Venus Virgo (Meg Foster), Charly (Sherri Moon Zombie), Panda Thomas (Lawrence Hilton-Jacobs) y Levon (Kevin Jackson), cada uno armado con un arma, deben tratar de matar y mantenerse con vida mientras están siendo cazados por payasos asesinos conocidos como los Heads (Sick-Head, Psycho-Head, Schizo-Head, Sex-Head, Death-Head and Doom-Head). Las 3 personas que dirigen las apuestas del juego deciden quién va a sobrevivir más tiempo ya que nunca nadie ha sobrevivido y el premio por sobrevivir es la libertad.
Rob Zombie vuelve a los fundamentos crudos y repulsivos del cine de terror con 31. La película en realidad no tiene una trama, pero es una mezcla de homenajes a clásicos del género de terror como The Texas Chainsaw Massacre y toma prestadas ideas de clásicos de culto como The Running Man. Después de que su película anterior, The Lords Of Salem fue recibida con decepción por la mayoría de los fans del horror y de Rob Zombie por igual por ser "diferente de una típica película de Rob Zombie", organizó una campaña de financiamiento colectivo y prometió a sus fans y fans de terror que en su proxima película volvería a su estilo brutal y sangriento por el que es conocido.
Se trata de una típica película de Rob Zombie. Muchos de los mismos actores que ha usado antes se presentan nuevamente, y básicamente, interpretan los mismos personajes de sus otras películas, un montón de campesinos sureños mal hablados y vulgares. La película en sí tiene un ritmo bastante bueno. Los personajes son todos de una sola dimensión, lo que es una pena, ya que The Devil's Rejects tenía personajes maravillosamente memorables, un gran diálogo Tarantino-esco y una gran banda sonora. Los personajes son estereotipos del campesino sureño que se pasa contando chistes vulgares o diciendo una grosería despues de otra. He encontrado que sólo Meg Foster y Lawrence Hilton-Jacobs realmente brillan como las figuras paternas del clan. The Heads no son fascinantes, con la excepción de Richard Brake como Doom-Head, el asesino más letal de 31. Son más caricaturas que personajes, sus escenas son cortas y en realidad nunca se llega a conocerlos, aparte del hecho de que son los malos de la película. Es un gran potencial de personajes desperdiciado. Richard Brake se roba absolutamente la película y es el centro de atención como Doom-Head. Es amenazante, poético y mortal. Él es el mejor personaje que tiene 31 y tiene líneas memorables como "In hell, everybody loves popcorn" y "I ain't no fu**ing clown". Incluso tiene un muy largo monólogo en blanco y negro al comienzo de la película, presentándose a sí mismo.
A pesar de sus muchos defectos, es una muy buena película. Es violenta, sangrienta y con un ritmo rápido. Las secuencias de acción y lucha son abundantes, aunque la cámara tiende a acercarse muy cerca en ciertas escenas. Algunas veces tuve que adivinar lo que estaba ocurriendo, ya que la cámara estaba moviendose demasiado. En fin, es un festival de locura al estilo grindhouse llena de sangre y morbo presentado como Rob Zombie suele hacerlo.
Puntuación: 3 alcapurrias.
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