Como una joven independiente que intenta encontrar su camino en su aldea china, Mulan (Liu Yifei) se enfrenta a una vida de servidumbre, con su padre, Zhao (Tzi Ma), teniendo grandes esperanzas de un matrimonio exitoso. Mulan no quiere participar en tal conformidad, ya que tiene en posesión poderes especiales de chi que rara vez se le permite explorar. Cuando el malvado Rouran, liderado por Bori Khan (Jason Scott Lee), hace un plan para derribar la Ciudad Imperial, el Emperador (Jet Li) ordena a los hijos de las aldeas que unan fuerzas y se enfrenten a la amenaza que se avecina. Al darse cuenta de que no es de utilidad para el ejército como mujer, Mulan asume una identidad masculina y pronto se pone a trabajar bajo el mando del comandante Tung (Donnie Yen), mientras que el soldado Chen Honghui (Yoson An) hace amistad con la fuerte recluta. Mientras los hombres de Tung se preparan para la guerra con los Rouran, Mulan es el objetivo de Xian Lang (Gong Li), una bruja esclavizada por Bori Khan que siente curiosidad por el extraño espíritu de la guerrera secreta.
Esta nueva (y sumamente esperada) versión de Mulan de Disney comienza con un gran viaje a través de un antiguo pueblo chino. Claramente, una introducción tan amplia estaba destinada a ser experimentada en la pantalla grande, y seguramente, a la directora Niki Caro le hubiera gustado ver su hermosa y heroica epopeya de acción en vivo en los cines. En marzo, cuando la película tuvo un adelanto por primera vez en Hollywood, ese ciertamente iba a ser el caso. Ahora, la película llega como exclusiva de Disney+, por $30 adicionales, pero el tamaño de la pantalla no puede quitarle el corazón, el humor y la acción a Mulan. Esta es, por mucho, mi película favorita de los muchos remakes de live action de Disney. Caro ofrece un cuento de hadas transformador con todo el juego de espadas de una película épica wuxia. Si alguna vez quisiste ver cómo Disney haría una película como Crouching Tiger, Hidden Dragon (2000), aquí la tienen.
Para ser honesto, nunca me gustó la película animada de 1998 de Mulan. Aquí no hay canciones, dragones como mascotas ni espíritus ancestrales, esta es solo una historia sobre el compromiso de una joven enérgica con el deber, su país y su familia. Ese fue siempre el corazón de la historia, de todos modos, y Caro se apega a los ritmos que más importan. No hay ningún intento de convertir a Mulan en una princesa en busca de un príncipe. Ella es una heroína y una guerrera de principio a fin. Liu Yifei interpreta el papel principal de Hua Mulan, una chica poco femenina con una energía ilimitada, para el deleite de su padre héroe de guerra y la angustia de su madre. Es tradición que las mujeres sean tranquilas y obedientes, para que estén mejor emparejadas con un marido. Pero ignorar sus deberes también es deshonrar a la familia, y aunque Mulan valora su independencia, ella lo valora también. Cuando el Emperador (un irreconocible Jet Li) declara que cada familia debe ofrecer a un hombre como voluntario para ayudar en la lucha contra el rebelde invasor Bori Khan, Mulan se escapa con el atuendo y la espada de honor de su padre para unirse al ejército en su lugar.
Uno de los desafíos a los que se enfrenta esta versión de Mulan es disfrazarse de hombre. Funciona de la misma manera que Clark Kent, siendo indistinguible de Superman, funciona. Los hombres que rodean a Mulan, que se renombra a sí misma como Hua Jun, nunca imaginarían a una mujer en sus filas, por lo que ni siquiera lo consideran, a pesar de que está justo frente a sus ojos. Hua Jun tiene muchos momentos incómodos, incluida cierta confusión con Chen Honghui, pero logra impresionar a todos, incluido su comandante con su fuerza, habilidad y compromiso. A diferencia de demasiados remakes, incluidos los anteriores de Disney, Mulan toca todas las notas familiares con el mismo valor emocional, al tiempo que agrega aspectos nuevos que fortalecen los temas subyacentes.
La incorporación de una nueva villana, la cambiante Xian Lang, es como la contraparte malvada de Mulan. Si bien la devoción de Mulan por su país define quién es ella, las lealtades de Xian Lang son más confusas. Ella es básicamente una reelaboración del personaje de la película original Hayabusa con complejidades humanas. Xian Lang demuestra ser uno de los personajes más interesantes de la película, porque otros dejan mucho que desear. Si bien Jason Scott Lee es apropiadamente grosero como Bori Khan, es un villano que deja mucho que desear incluso para los estándares de Disney. La Mulan de Liu Yifei se une a un grupo de reclutas inadaptados que brindan algo de humor, pero honestamente, no tanto como la propia Mulan. El dragón/mascota de Mulan, Mushu, ha sido reemplazado por un fénix sin voz, que flota a través de las escenas como una especie de guía espiritual. Su inclusión es una distracción en una historia fundamentada y significativa sobre el honor, el coraje y la fidelidad a uno mismo.
En general, tengo que decir que Mulan es la adaptación de live action de Disney más satisfactoria que he visto. Liu Yifei y Gong Li dan actuaciones impresionantes, y la historia entre ellas es muy Disney. Los efectos visuales de la película son impresionantes, y la acción es aún más impresionante. Pero a diferencia de las películas de live action anteriores de Disney, esta tiene un formato más grande. Al ser la historia sobre una guerrera, la violencia es necesaria (incluso si está clasificada como PG-13), pero el derramamiento de sangre se mantiene al mínimo para mantener todos los estándares familiares de Disney. La directora Niki Caro ha hecho un trabajo increíble a lo largo de su carrera, pero esta es sin duda su mejor película. Ya sea en la pantalla grande o en la comodiad del hogar, Mulan es la película animada y magnífica que esperaba que fuera. Al final, Mulan es muy diferente de la versión animada de 1998. Es muy realista, lógica y razonable. Hay tantos temas, como el despertar del poder femenino, el afecto de padre y hija, y la lealtad al país y uno mismo, que enriquecen esta película. Si hay una cosa que brilla en esta película es el guión, ya que tiene todos los elementos de una historia maravillosa y el poder espiritual que una buena película tendría que tener. No se la pueden perder.
Puntuación: 4 alcapurrias y media mordida.
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