Un misterioso vagabundo llamado Paul (Ethan Hawke) y su perra Abbie hacen su camino hacia México a través del árido desierto del viejo oeste. En un intento por acortar su viaje, atraviesan por la ciudad olvidada de Denton, un lugar que es apodada por los lugareños como "Valle de la Violencia". La ciudad minera, una vez popular, está casi abandonada y controlada por un grupo de descarados y inadaptados, entre ellos el aparentemente intocable Gilly (James Ransone), que es el hijo problemático del sheriff de la ciudad Marshal (John Travolta). Mientras que las tensiones aumentan entre Paul y Gilly, los residentes de Denton son testigos de un acto inevitable de violencia que comienza una reacción en cadena desastrosa, afectando las vidas de todos los implicados y arrastra a la ciudad entera en un cruce sangriento de venganza. Mary-Anne (Taissa Farmiga) y Ellen (Karen Gillan), dos hermanas que administran el único hotel de la ciudad, tratan de encontrar el bien en Paul y Gilly, mientras buscan desesperadamente su propia salvación. Sólo Marshal se esfuerza por detener la violenta histeria, pero después de un desastroso descubrimiento sobre el pasado de Paul no puede detener su búsqueda de venganza.
In A Valley Of Violence es un western con un héroe poco improbable para vengar la muerte de su amada perra. Esta parte de la trama suena similar a la de John Wick, pero ahí es donde terminan las similitudes. Paul es un vagabundo que termina en una ciudad olvidada controlada por Marshal. Él tiene un altercado con Gilly, el hijo de Marshal, y le aconseja salir de la ciudad. A pesar de que lo hace es perseguido, atacado y dejado por muerto por Gilly y sus amigos mientras matan a su única amiga y compañera, la perra Abbie. De ahí en adelante la historia se convierte en una de venganza.
Desde los créditos de apertura y el soundtrack de la película se hace evidente que el director es un fan de los viejos Spaghetti Westerns. La historia es bastante básica, aunque lo que separa esta película de los viejos Spaghetti Westerns es que el héroe desde un principio trata de evitar enfrentamientos. Sólo quiere que lo dejen solo. Incluso cuando es perseguido por una de las jovenes que dirige el hotel de la ciudad. De hecho, no es un héroe valiente sino un desertor del ejército y un asesino en masa que dejó a su esposa e hija para alistarse en el ejército y nunca regresó. El sheriff que es retratado como el villano principal también trata de prevenir el derramamiento de sangre hasta el final y nunca mata a nadie. Incluso los otros villanos en la película no son los típicos sicópatas armados con armas y de hecho la mayoría de las personas disparando armas terminan fallando sus tiros la mayor parte del tiempo. También hay un diálogo cómico entre los personajes, así como escenas de la perra interactuando con el personaje de Hawke.
Las actuaciones de todo el elenco son excelentes. Ethan Hawke es grandioso en el papel principal y James Ransone es igualmente convincente como el principal antagonista. John Travolta da una de sus mejores actuaciones al día de hoy como el sheriff del pueblo. Taissa Farmiga y Karen Gillan también son muy buenas en su papeles como dueñas del hotel local. La dirección y la cinematografía son excelentes, al igual que la música de la película, que evoca recuerdos a la de Ennio Morricone y completa la experiencia de la película. La música combina elementos de algunos de los temas más familiares que se encuentran en los Spaghetti Westerns y suena como si pudiera haber salido de una película clásica de Clint Eastwood.
En general, es un gran western y una película de alta intensidad que vale la pena cada minuto de su duración. La película no es del todo tiroteos o derramamiento de sangre pero tiene bastantes escenas de pelea y no se atasca ni se centra mucho en el diálogo. En última instancia toda la trama es básica y no hay ninguna razón real para lo que ocurre aparte del hecho de que alguien estaba en el lugar equivocado en el momento equivocado.
Puntuación: 4 alcapurrias.
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