Durante la Segunda Guerra Mundial, el joven Ferruccio Lamborghini (Romano Reggiani) regresó a Italia después de la guerra. Su padre era un agricultor que quería que su hijo siguiera cultivando, pero Ferruccio estaba más interesado en la mecánica y quería construir tractores. Lamborghini con su amigo Matteo (Matteo Leoni) modificó un viejo Fiat Topolino que había comprado y comenzó a construir el primero de sus tractores Carioca. Poco después se casa con Clelia Monti (Hannah van der Westhuysen), quien muere al dar a luz a su hijo Tonino (Lorenzo Viganò). En 1963, Ferruccio (Frank Grillo) se volvió a casar con Annita Borgatti (Mira Sorvino) y estableció su propia fábrica de tractores. Al mismo tiempo, Ferruccio estaba en una rivalidad con Enzo Ferrari (Gabriel Byrne), quien ya estaba en la cúspide de su éxito con sus vehículos Ferrari y estaba considerando producir su propio automóvil bajo la marca Lamborghini. Finalmente, en el Motor Show de Ginebra de 1964, el primer Lamborghini 350 GT compitió con Ferrari. Más tarde, se lanzó el Lamborghini Miura, una innovación revolucionaria que sorprendió a todos. Ferruccio se convirtió en la leyenda detrás de Lamborghini, y a la vez en uno de los autos deportivos más populares del mundo.
Piensa, si fueras a ver una película sobre la leyenda automotriz Ferruccio Lamborghini, diseñador de una de las marcas de automóviles de lujo más icónicas del mundo, qué tipo de película esperarías que fuera? Sin duda, querrás que sea rápida, que muestre los autos, mujeres y el estilo de vida de alguien que llegó a definir la velocidad en todas sus formas. Pero eso no es lo que obtenemos de la película biográfica del escritor y director Robert Moresco, Lamborghini: The Man Behind The Legend, que, a pesar de la interpretación de la estrella Frank Grillo, nunca pierde la neutralidad y cuenta la versión menos interesante posible de la historia de Lamborghini.
A veces he criticado películas biográficas porque las dejan de una manera que son imposibles de superar. Lo mismo ocurre en la película de Lamborghini que está claramente limitada por su minúsculo presupuesto. Si bien tenemos un par de escenas de Frank Grillo al volante de los llamativos vehículos, son breves y en un caso se usan como una triste metáfora de su rivalidad con Enzo Ferrari, quien no hace más que sonreír y tirar guiños en toda la película.
Lamborghini: The Man Behind The Legend trata en gran medida sobre Ferruccio y sus inicios como diseñador de tractores. Así es, tractores. Interpretado durante una gran parte de la película por Romano Reggiani, los humildes comienzos del joven Ferruccio contrastan con sus ambiciones descomunales. Lo vemos arriesgar todo, desde los ahorros de su vida familiar hasta sus relaciones personales, para hacer que el nombre de Lamborghini sea algo para recordar. Pero no es hasta un encuentro insultante con Ferrari, que le dice "Vuelve a tus tractores", que Ferruccio decide intensificar su juego y desafiar al mayor fabricante de automóviles del mundo.
Con un tiempo de duración de poco más de 1 hora y 30 minutos, la película nunca tiene tiempo suficiente para explorar completamente quién era Ferruccio o sus motivaciones, aparte del deseo de encontrar la "perfección". Robert Moresco, co-guionista ganador de un Oscar por Crash (2004), intenta dirigir sin éxito al abarrotar tanto como sea posible a pesar de las limitaciones del tiempo y presupuesto. La complicada vida personal de Ferruccio, que implica infidelidad, traición y alejamiento de su esposa Annitta, son motivo de burla pero nunca se sienten importantes. Lo mismo ocurre con una inminente huelga de trabajadores que amenaza con destruir todo lo que Ferruccio ha construido. Y, sin embargo, se espera que creamos que estas cosas juegan un papel clave en la eventual caída de Ferruccio, que se produce en un abrir y cerrar de ojos, momentos después del exitoso lanzamiento del Lamborghini 350 GT en 1964.
En el lado positivo, Frank Grillo aprovecha esta rara oportunidad de interpretar un papel principal dramático. Grillo, un tipo que se habría sentido como en casa en la era dorada de las películas de acción de los años 80's y 90's, muestra la confianza de un hombre con grandes sueños que arriesgará cualquier cosa para verlos realidad. Lamentablemente, deseé que la película fuera digna de su actuación. Con suerte, Grillo tendrá más oportunidades en el futuro.
En general, la película no fue un retrato fiel del hombre legendario que inventó uno de los autos más elegantes del mundo. Parecía un compendio sacado de Wikipedia, carecía de investigación y no honraba la verdadera lucha de Ferruccio, sino que se centró en lo egoísta que era. La representación de su personaje solo se enfocó en coquetear con mujeres y lastimar a sus seres queridos. Tras la famosa comercialización de los automóviles Lamborghini a lo largo de la década de 1960, Ferruccio enfrentó un gran dilema con sus tractores, que fueron rechazados por algunos países. Para evitar una pérdida masiva, vendió el 51% de Lamborghini a un empresario suizo. Incluso sufrió una pérdida masiva durante la enorme crisis de petróleo en Italia en 1973, cuando los costos de producción aumentaron. Vendió su 49% restante de la compañía y se retiró de su cargo. Su batalla real no se reveló en la película, sino que solo se insinuó. Al final, Lamborghini: The Man Behind The Legend de alguna manera logra transmitir las intenciones del director con hermosas escenas, autos veloces y Frank Grillo haciendo todo lo posible para capturar la personalidad de este ícono. Pero la lucha real del hombre detrás de la leyenda merecía algo mucho mejor que esto.
Puntuación: 2 alcapurrias.
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